Para los pacientes que requieren de un trasplante de córnea
durante la emergencia sanitaria por COVID-19, los médicos especialistas del
Banco de Tejido Corneal de la UMAE Hospital General Dr. Gaudencio González
Garza del Centro Médico Nacional La Raza, implementaron un protocolo que les
permite que en cualquier momento, se pueda disponer del tejido corneal para ser
trasplantado.
La Doctora Karla Verdiguel Sotelo, quien es la encargada del
Banco, refirió que gracias a la donación cadavérica altruista, capacidad
instalada y contar con los mayores estándares de calidad, se tienen en
resguardo 88 tejidos, los cuales se encuentran en las mejores condiciones de
preservación para ser trasplantadas.
Durante este tiempo de pandemia, el Banco ha dado respuesta
a 11 pacientes, que por la inminente perforación y la eventual pérdida total
del globo ocular, se les realizó el trasplante, bajo la categoría de asignación
prioritaria, contemplada en la Ley General de Salud. Los pacientes pertenecían
a la Ciudad de México, Quintana Roo, Yucatán y Estado de México.
La Doctora Karla Verdiguel indicó que previo al trasplante,
el paciente tiene que ser evaluado en el triage respiratorio, con la finalidad
de detectar los síntomas relacionados con Covid-19 y reafirmó que mientras dure
esta contingencia, habrá disponibilidad de tejido corneal para su uso y se
atenderán a todos aquellos pacientes en los que su única opción terapéutica sea
un trasplante.
Verdiguel Sotelo recordó el caso del señor Raymundo de 45
años, originario de Toluca, Estado de México quien comenzó con una irritación
en el ojo izquierdo que iba reduciendo la capacidad de visión; cuando fue
recibido en su hospital general de zona, se determinó que tenía una queratitis
infecciosa que se agravó en 15 días.
“Llegó con nosotros por urgencias con una pérdida de visión
del 100 por ciento, lo registramos en el Centro Nacional de Trasplantes para dar
aviso de la asignación prioritaria. Al día siguiente se le realizaron las
pruebas que determinaron ser negativo a COVID-19”, informó la doctora.
Por su parte, Raymundo comentó que cuando arribó al hospital
pensó que no tenía posibilidad de recuperar la vista.
“Le doy gracias a la doctora Verdiguel, porque en cuanto
estuve en sus manos dijo que sí podía ayudarme, me dio una esperanza de vida,
explicó el procedimiento y me pidió que le echara muchas ganas”, comentó
Raymundo.
“La donación de órganos es de suma importancia, así como yo
fui acreedor de una córnea, mañana puede ser otra persona. El día de hoy me
comprometo con el IMSS a dar oportunidad de salvar más vidas”, expuso.
“De no haber contado con este resguardo de tejido corneal,
se pierde el globo ocular y por consiguiente la visión”, expresó la
especialista.
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