lunes, 6 de agosto de 2012

Columna


Reflexiones
Por Francisco Alfaro Ramírez

LA REPÚBLICA

La república tiene su origen en una palabra que por no utilizarse pareciera que ha quedado fuera del lenguaje común de la población, la res publica, es decir la cosa pública, lo que implica que la república es un elemento que se hace y pertenece a todo el público, lo que nos pone como herederos de la dirección de la cosa pública, todo lo que nos afecte nos beneficie, o nos complique la existencia dentro del ámbito público, nos compete y nos compromete.

Hemos conformado y nacido en un país que pese a sus brutales gobernantes hemos podido salir adelante, no han sabido los absurdos gobiernos encaminar un país rico en población, con grandes recursos naturales y con una tierra rica y generosa, el problema es que hemos dejado que unos cuantos que han tenido la fortuna de gobernar, se han hecho de grandes fortunas, cierto que sin esfuerzo, solo sabiendo que con leyes hechas  por personajes como ellos, les garantiza impunidad.

La cosa pública pertenece a todos los pobladores, pero hemos dado mucho peso a los habladores, a aquellos que dicen defendernos, hemos creado caudillos, los cuales ponemos en altares, ellos se la creen y nosotros lo fomentamos, creemos que ellos podrán solucionar los problemas urgentes y prioritarios que nos afectan.

Así que debemos de desmitificar a todos esos ladrones que sin hacer nada cobran, sin producir nada ganan y se dan bonos de actuación.

Todo presunto político que nos gobierna es igual que tú o que yo, solo que ellos tienen la posibilidad de proponer y hacer que se ejecuten obras en beneficio de las personas, pero debemos de comprender que las obras realizadas son siempre pagadas con tu dinero, y estas son en apariencia otorgadas a profesionales, pero, sabemos que los que realizan las obras tienen que hacer donaciones en obra, especie o económica para seguir prestando sus servicios.

Lo que debemos de entender que quienes gobiernan, quienes ejecutan, quienes juzgan, son personas normales que nada tienen de especiales, y muchos de ellos tienen el puesto gracias a sus relaciones, no por sus aptitudes, por lo que podemos encontrar brutos legislando, brutos juzgando, brutos gobernando, todos ellos llegando y haciendo sin pensar en el bien común, en la población, es decir en México, ya que necesario entender que México no es un terreno, ni un lugar, es una idea que confluye en un lugar, somos todos los que queremos tener y hacer de un territorio, un sitio de prosperidad, desarrollo, cultura, oportunidades, libertad, justicia y búsqueda de una real democracia.

Todos hacemos, decimos, criticamos, nos quejamos, pero también nos comprometemos con nuestra comunidad cercana, es decir nuestra familia, cuando la tenemos o con nuestro grupo, o con nuestra comunidad, pero también hemos dejado de hacer nuestra parte, que es, conducirnos de mejor manera, evitando corromper y con ello corrompernos, hemos dejado que unos cuantos nos digan, dirijan, y nos gobiernen, pero ellos no han sabido corresponder  a la confianza que se les ha conferido, con unos cuantos votos, generados por esta aparente democracia, es decir, todos somos responsables de la cosa pública, de la dirección de la república, la cual necesita de personas como tú, como yo, los que queremos hacer algo por nuestra población que es hacer algo por nuestro México, por nosotros.

La pregunta es: ¿Queremos sacar del atraso a nuestro país, comprometidos con la población y con nosotros mismos, es decir con México?
Por supuesto tú tienes la mejor opinión.